Moda, peinados – gustos: todo nuestro estilo de vida está sujeto a cambios constantes. Lo que está de moda hoy, puede no estarlo mañana. Pero algunas cosas siempre vuelven y se convierten en auténticos clásicos. Como los tipos de interés. En cuanto vuelven, ya no queremos que se vayan y queremos usarlos como algo natural para acumular nuestra riqueza. Una clase de activos que puede hacer esto son los bonos.
Los bonos no son más que títulos de deuda que utilizan los Estados (bonos del gobierno) o las empresas (bonos corporativos) con fines de financiación. En lugar de contratar un préstamo bancario, los emisores emiten un bono con condiciones fijas, como el volumen, plazo, intereses y plazos de amortización. Al comprar estos valores de interés fijo, el inversor presta dinero y recibe intereses regulares a cambio.
Especialmente en tiempos de tipos de interés más altos, puede tener sentido analizar más de cerca los bonos. No se correlacionan de manera particularmente fuerte con las acciones y pueden complementar o diversificar útilmente una cartera.
Al igual que las acciones, los bonos también se pueden negociar. El mercado se caracteriza esencialmente por inversores institucionales. También hay algunos otros puntos importantes a considerar. Si usted es un inversor privado que no desea negociar bonos usted mismo, puede invertir en un fondo DWS, por ejemplo, y así beneficiarse de los años de experiencia y la investigación exhaustiva de los expertos de DWS.
Los pronósticos se basan en suposiciones, estimaciones, creencias y modelos o análisis hipotéticos que pueden resultar inexactos o incorrectos. Fuente: Perspectivas del mercado DWS, a septiembre de 2024.
Fuente: Perspectivas del mercado DWS, a septiembre de 2024.
Fluctuaciones de precios relacionadas con el mercado, la industria y la empresa.
En su caso, riesgo de tipo de cambio.
El fondo realiza transacciones significativas de derivados con varios socios contractuales. Si un socio contractual no realiza los pagos, por ejemplo debido a la insolvencia, esto puede provocar que la inversión sufra una pérdida. Los derivados financieros no están sujetos a un seguro de depósitos obligatorio o voluntario.
Debido a su composición/las técnicas utilizadas por la administración del fondo, el fondo especial tiene una volatilidad significativamente mayor, es decir, los precios de las acciones pueden estar sujetos a fluctuaciones significativas a la baja o al alza, incluso en períodos cortos de tiempo.
El valor de la acción puede caer por debajo del precio de compra al que el cliente compró la acción.
Diversificación limitada al centrarse en un país, lo que aumenta el riesgo de que el fondo se vea afectado negativamente por las condiciones económicas y políticas en las respectivas regiones.