26.08.2024 Gráfico de la semana

El apoyo de la oferta monetaria se desvanece

Durante el último año, los mercados de valores han superado el crecimiento de la oferta monetaria. Esto se puede ver de diferentes maneras, pero lo cierto es que las acciones han perdido uno de los estímulos que antes les beneficiaban.

3 minutos de lectura

El breve episodio de turbulencia en los mercados a principios de agosto no ha afectado el optimismo de los inversores en acciones. No solo se han recuperado las pérdidas, sino que el índice MSCI World está a punto de recuperar su máximo histórico de mediados de julio, siempre que el presidente de la Reserva Federal de EE. UU., Jerome Powell, no frustre las expectativas de recortes en los tipos de interés con su discurso de hoy en Jackson Hole. La reacción del mercado a principios de mes debería servir de advertencia para evitar una sobreestimulación. De hecho, la velocidad con la que el mercado ha anticipado una intervención inmediata de la Fed podría ser motivo de preocupación. 

Al mismo tiempo, los mercados bursátiles parecen haber reducido su dependencia del dinero barato y casi ilimitado, del que eran hasta hace poco. Por un lado, los índices bursátiles siguen alcanzando nuevos niveles récord, a pesar de los significativos aumentos en los tipos de interés recientes. Por otro lado, como muestra nuestro Gráfico de la Semana, los mercados de acciones también han comenzado a desvincularse de la oferta monetaria. Aunque siempre es prudente no atribuir los movimientos del mercado a un solo factor, existe una clara sincronización entre estas dos variables en los últimos diez años.

 

Las acciones globales superan a la oferta monetaria

Oferta monetaria combinada de M2 de EE. UU., Eurozona, Reino Unido y Japón
Fuentes: Bloomberg Finance L. P., DWS Investment GmbH al 20/8/24

En la actualidad, no esperamos una expansión significativa de la oferta monetaria por parte de los cuatro principales bancos centrales (EE.UU., Eurozona, Reino Unido y Japón) en los próximos años. Más bien, proyectamos que ésta crecerá al ritmo de la economía, en el mejor de los casos. A corto plazo, la débil demanda de crédito sugiere una menor disponibilidad de estímulos. En consecuencia, es probable que los mercados bursátiles reciban menos impulso de la oferta monetaria en comparación con períodos recientes. Por lo tanto, los mercados de acciones deberán encontrar otros factores para sostener su tendencia alcista. La expectativa en torno a la inteligencia artificial podría no ser suficiente para mantener el impulso y podría perder fuerza progresivamente. Asimismo, no prevemos saltos significativos en el crecimiento económico para 2024 y 2025. Con una reducción en los factores de crecimiento, esperamos que las ganancias en los mercados bursátiles sean moderadas.

Volver a la sección

CIO View